A medida que la Comunicación No Violenta remplaza nuestros viejos patrones de defensa, retroceso o ataque en nombre de los juicios y las créticas, comenzamos a percibirnos a nosotros y a los otros, así como también las buenas intenciones y mejores relaciones resplandecen. El estar a la defensiva y las reacciones violentas comienzan a minimizarse a medida que el corazón se abre.» – Marshall Rosenberg